En el mundo, el papel de la mujer está recobrando mayor importancia, pues todas estamos en una constante lucha para tener el respeto que merecemos y se nos trate de igual a igual con el género masculino. Ahora más que nunca necesitamos de mujeres valientes que tengan una misión clara de la vida, y que sobre todo crean que de cada error pueden aprender una lección.
No basta con decir que ¡Soy una mujer empoderada! Esa virtud debe comenzar desde el interior para así transformar nuestro exterior, es decir, lograr empoderarnos de manera integral tanto en casa, en el trabajo, y en todo sitio en donde nos involucremos.
En el siguiente artículo, descubrirás cuáles son las características de una mujer empoderada. Si aún no eres una de ellas o no cumples ciertas cualidades, esfuérzate, para conseguirlo. ¡Aún estás a tiempo!
1. Es única en todo su esplendor, jamás se comparará
No es necesario que se compare con otras mujeres porque tiene presente que todos los seres humanos somos distintos, y por ende las habilidades o capacidades que puedan tener también serán diferentes. Amará sus defectos y virtudes que la hacen única y especial.
2. No tiene que estar hablando mal de otras
Una mujer empoderada, enfoca su atención en lo que quiere lograr, y no vive enojada con el universo cuando las cosas le salen mal. Se da cuenta de las bendiciones que tiene y sigue trabajando para alcanzar sus sueños.
3. Mantiene actitud positiva ante todo, es consecuente
Sabe muy bien que lo importante es salir de la situación en la que se encuentra, que cada decisión que tomó tendrá su consecuencia y que por esa razón deberá afrontarlo. Así que comenzará a buscar la forma para salir adelante.
4. Una mujer que ayuda a otras de su género, no piensa solo en ella
Está pendiente de las demás, de las que son víctimas de violencia, de las que tienen una autoestima baja, de las que no saben qué hacer con su vida. Ellas siempre están ahí, para animarlas, para decirles que aún queda una esperanza. Algunas forman Muchas grupos, ONG, etc.
5. Creen que cada error o equivocación, no es el final de la vida
No importa si lo han perdido todo. Equivocarse no es grave, lo grave es no aprender de ello. Y estas mujeres lo saben, hacen que sus sueños sucedan, tienen sus objetivos claros, y no se dejan amilanar por ninguna situación negativa o por el que dirán de las personas que están a su alrededor, confía en sí misma.
6. Siempre muestran humildad en los hechos y en sus actos
Lamentablemente, este término lo asocian a menudo con aquella que tiene carencias. Sin embargo, la humildad es reconocer a los demás, y actuar sin prepotencia, una mujer poderosa sabe muy bien cuáles son sus áreas de oportunidad y sus debilidades. Está abierta a las críticas constructivas que la ayuden a mejorar, sin importar de quién vengan, pues está en constante aprendizaje.
7. Tienen tino para comunicarse con los demás
Tener poder no significa hablar fuerte o gritar. Este tipo de mujeres tienen una personalidad segura, pero suave. Es decir, han entendido que un grito no las hace más autoritarias. Saben tratar a las personas que están a su alrededor. Esta suavidad se refleja en su trato, cuando conversan, cuando sonríen, en su mirada, y al pedir algo de manera amable.
8. Respeta a los del otro género, no están en contra de ellos
Estar empoderada no significa que se tiene que odiar a los varones o comenzar una lucha contra ellos. En primer lugar, porque el odio no está en su corazón, respeta los puntos de vista y trabaja para integrarlos porque lo que busca es eso, integrarnos como sociedad y para que esto funcione se necesita del apoyo de todos.
Es importante tomar conciencia si algunas de estas características te convierten en una mujer empoderada, si crees que todavía no, debes trabajar en ciertos aspectos de tu vida. Recuerda que nunca es tarde para alcanzar el poder que todas poseemos, pero que en ocasiones nos da miedo mostrarlo. El mundo necesita de más mujeres empoderadas y que tú puedes hacer la diferencia.